
Lo confieso. A mi me van los cómics de superhéroes. Es más, soy un marvelzombie declarado. Sin embargo, desde que la biblioteca de mi pueblo ha adquirido bastantes ejemplares de
bande dessinée, me estoy enganchando al cómic europeo. Ya me he leído unos cuantos números de
XIII, un par de obras de Miguelanxo Prado (
Trazo de tiza y
Quotidanía Delirante)y una novedad de Glénat llamada
Mendigo . Y ahora le ha tocado el turno a Maestros cerverceros.
Guionizada por Van Hamme (el mismo autor de
XIII y
Largo Winch), dibujada por Vallès y publicada por PlanetadeAgostini, Maestros cerveceros nos narra la genealogía de una familia de fabricantes de cerveza desde mediados del siglo XIX.
Con un contenido similar al de un culebrón familiar (aunque no venezolano), somos testigos del crecimiento del linaje de los Steenfort gracias al oro líquido de aquella época, es decir, la cerveza. Aunque sólo me he leído los dos primeros números (de cuatro) ya he visto de todo: adulterios, hijos bastardos, matrimonios no deseados, amores despechados, riquezas y fortunas efímeras, etc., pero todo de un modo muy bien explicado y sin llegar a aburrir.
El primer volumen nos muestra el inicio de la saga familiar con Charles Steenfort, que estando encerrado en un monasterio en Bélgica aprende los secretos del tratamiento y conservación de la levadura para lograr una cerveza óptima. Y así a lo largo de décadas y décadas: pioneros de esta bebida, creación de las primeras empresas, primeras revoluciones sindicales, la Primera Guerra Mundial, etc. A destacar la gran labor documental de Vallès a la hora de mostrar las costumbres, edificaciones y vestimenta que se suceden con el paso del siglo XIX al XX.
En definitiva, y con un buen dibujo detallista de Vallès, os recomiendo este “fresco histórico” que se lee muy bien y que, además, esta obra sí que serviría de material a incluir en las clases de historia de las escuelas.